Cómo mantenerte productivo cuando no te sientes motivado

Como estudiante, me ha pasado muchísimo: tengo una gran lista de cosas para hacer, pero cero ganas de comenzarlas. Ya sea por cansancio, estrés, falta de interés o simplemente una mala temporada de nuestras vidas, hay momentos en los que mantenerse productivo parece imposible. Es por ello que hago este post, para mostrarte qué puedes hacer para poder recuperar (aunque sea un poco) de la motivación para comenzar a completar tus tareas pendientes. Te mostraré cosas muy simples que puedes implementar en tu día a día y que tendrán un gran resultado.

Define tu meta

Establece el porqué de lo que tienes que hacer. ¿Qué beneficios obtienes de ello? ¿Dinero? ¿Conocimiento? Puede que una de tus tareas sea estudiar para un examen, la meta será sacar una buena nota o aprobar la materia. La meta que establezcas debe ser motivadora y clara, además de desafiante, ya que esto último te motivará (o debería) a trabajar duro para lograrlo.

Una vez que sepas cuál es tu meta, tenla presente siempre en tu cabeza, o si prefieres, puedes escribirla en un post it y ponerla en tu escritorio para tenerla presente en todo momento.

Encuentra tu espacio

Todos debemos tener un lugar destinado a trabajar, ya sea que este sea tu escritorio, la sala, el comedor, realmente no importa, pero define un espacio en el que tengas destinado para trabajar. Yo por ejemplo uso el escritorio que está en mi cuarto para estudiar y hacer tareas, aunque en ocasiones voy a cafeterías o a algún lugar tranquilo fuera de mi casa.

Es importante mencionar que tu espacio debe ser un lugar tranquilo, con suficiente luz y ordenado, ya que esto te inspirará a querer trabajar ahí. Si el espacio que usarás es dentro de tu casa, decóralo y hazlo tuyo, pon plantas, decoraciones, frases inspiradoras, etc. pero de preferencia que sea minimalista para no saturar el espacio; no hay cosa peor que tener todas las cosas tiradas por el escritorio sin espacio para poner tus libros o tu computadora.

Encuentra tu momento productivo

Hay personas que dicen que hacer lo más pesado por la mañana es mejor porque así te quitas los pendientes más grandes al principio del día y que por la mañana es cuando tienes la mayor motivación, etc etc. Siendo honesta, yo por las mañanas es cuando me siento lo menos productiva, y menos para hacer las tareas o proyectos más pesadas. Por el contrario, yo me considero más una persona nocturna, ya que siento que por la tarde/noche es cuando tengo la mayor motivación para trabajar. Es por ello que tú debes encontrar TU propio momento en el que te sientas más productivo, ya sea en la mañana o en la noche, lo que más te acomode y lo que más te de resultados positivos.

Planea tu día

Si eres como yo y tu momento productivo es por la noche, puedes usar la mañana para planificar qué harás durante el día, dividiendo cada una de las tareas que tienes pendientes. O si eres una persona mañanera puedes planificar tu día desde una noche antes. Ordena tus tareas según su importancia y establece tiempos límites realistas para completar cada tarea. De esta manera, tendrás un plan claro para el día y podrás trabajar de manera más eficiente.

Crea una rutina

Establece horarios para dormirte, para despertarte, y para hacer tus tareas. Crear una rutina no necesariamente significa que tenga que ser rígida, pero puede ser el principio para crear hábitos y a poder dedicarle el tiempo suficiente y necesario a cada una de las tareas a completar durante el día. Descansar es fundamental, así que no te olvides de dormir lo suficiente y de tener descansos durante el día, ya sea para tomar una siesta, para leer un rato, ver series, etc.

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Divide tus tareas

Muchas veces, cuando tenemos un proyecto muy largo y complicado, tendemos a abrumarnos y eso mismo hace que lo procrastinemos y no lo queramos comenzar. Para evitar esto, podemos dividir esta gran tarea en tareas más pequeñas y así no se sentirá tan amenazante.

Otra forma de enfrentar esa barrera que no te permite comenzar a hacer lo que tienes que hacer es con la regla de los 5 minutos, la cual te explico a detalle en ESTE POST.

Hacer una cosa a la vez

Se acerca el final del semestre y se nos juntan las tareas, así que intentamos hacer 3 tareas al mismo tiempo, porque así mataremos no 2, sino 3 pájaros de un tiro ¿No? Pues no. Es mejor hacer una tarea BIEN a la vez para luego pasar a la siguiente, además de que hacer muchas cosas a la vez te conducirá a la demencia, bueno, no tan así pero te abrumarás demasiado.

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Recompensas

Todos necesitamos incentivos para mantenernos motivados. Establece pequeñas recompensas para ti mismo cuando logres completar tareas importantes. Puede ser cualquier cosa, desde un capuccino en tu cafetería favorita hasta una tarde de cine. Las recompensas te ayudarán a sentirte motivado para seguir adelante.

Si bien es importante estudiar, es igual de importante dedicarte tiempo a ti y a tus seres queridos, y en general al descanso, así que intenta tener un balance entre aquellas cosas que tienes que hacer con meditación, lectura, dormir, jugar tu videojuego favorito, etc.

Es imposible poder mantenernos productivos todo el tiempo, pero sí que hay formas en las que podemos hacer que esos baches en los que podamos caer en ocasiones, sean más fáciles de esquivar o de salir de ellos. La universidad nos puede abrumar demasiado, especialmente cuando nos encontramos en el final del semestre, pero no debe ser así (no tanto) necesariamente.